Todo comenzó en un parque infantil singular donde, además de los juegos habituales, los pequeños contaban con una furgoneta de helados, una cocina y una barbacoa. Los hijos de Thomas se divirtieron durante horas y, luego, ansiaban algunas delicias culinarias para su propia guardería. Los padres acordaron: si los niños querían una cocina, la tendrían. Sin embargo, recordaban a un primo a quien le habían obsequiado una cocina prearmada que, tras tres meses, ya no se usaba. Necesitaban una solución más ingeniosa.
¡QUADRO al rescate!
Por lo tanto, construyeron juntos una fabulosa cocina QUADRO en color petróleo, con horno, estanterías y hasta con encimeras "auténticas". El colega de Thomas, que trabaja en una imprenta, diseñó los moldes para las placas de cocción. Una vez imprimidos... ¡voilà!, parecía una cocina real.
Tim y Finn están fascinados con el diseño. A veces arrancan las placas y las pegan en las paredes. No es lo que el inventor tenía en mente, pero aún así, es bastante creativo. Afortunadamente, mamá previó esto e imprimió algunos platos extra para tener de repuesto.
Pero, el periplo de la familia QUADRO no empezó en el parque infantil gastronómico, sino de un modo más tradicional, en Navidad. Thomas y su pareja descubrieron muy temprano que a sus hijos les encantaba escalar (más información sobre la importancia de la escalada para los niños: estructuras de escalada: un refuerzo para el desarrollo de los niños), así que primero les regalaron una estructura triangular de madera. Escogieron algo de alta calidad.
"Si compras barato, compras dos veces", dice Thomas con una sonrisa.
La estructura de escalada se utilizaba intensamente y hasta cierto punto podía remodelarse. "Pero los escalones siempre serán escalones", añade el padre. Por casualidad, descubrió QUADRO con la Home Edition, un producto que le resultó familiar. Y claro, hay un parque infantil QUADRO en la propiedad del vecino. Lleva allí más de 30 años, intacto; el vecino está muy satisfecho.
Como carpintero, Thomas es un fan de los sistemas modulares que permiten un diseño personalizado. Con cualquier otra cosa, se encuentra rápidamente con limitaciones y entonces no solo él se frustra, sino también sus hijos. Desde que renovó su casa casi por completo hace siete años, se ha vuelto más creativo y rebosa de ideas. Así que QUADRO fue perfecto para él.
Inicialmente, el parque infantil se situó en el salón - y en medio de todo. Pronto se trasladó a la habitación de los niños, construido sobre las dos camas: una cama a la derecha de la escalera, otra a la izquierda. Thomas quería optimizar al máximo el espacio, ya que actualmente solo cuentan con 120 metros cuadrados. Pero luego surgió un inconveniente: Los gemelos nunca habían dormido separados desde que nacieron, por lo que la remodelación afectó su rutina de sueño. Uno de ellos comenzó a irrumpir en el dormitorio de los padres muy temprano. ¡Esto debía cambiar!
Por lo tanto, volvieron a unir las camas y construyeron la estructura alrededor de la esquina para mayor estabilidad. Ahí sigue, firme como una roca, a pesar de que Finn y Tim son unos escaladores indomables. Les encanta tanto escalar que se suben incluso a las estructuras desmontadas, lo que sus padres no les permiten porque es peligroso.
Y cuando la construcción ya no sea tan atractiva para los niños, Thomas volverá a preguntar a los gemelos: "¿Construimos algo nuevo?". Quizá el parque infantil del dormitorio se transforme en una guarida de ladrones. Y la sofisticada cocina puede convertirse en una nave espacial. ¿Quién sabe...?
¡Estamos emocionados!
Si quieres entender por qué tus pequeños aventureros deberían jugar todo lo que puedan, lee nuestro artículo "El escalador superdotado. O: Por qué jugar es importante para todos".
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¡Esperamos tus propuestas!
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